La distancia eterna que hoy nos separa,
no es motivo para no encontrarte
en mi profundo corazón herido.
Allí estarás siempre,
en la plenitud de tu vida,
de tus actos y vivencias,
de tus dolores y alegrías,
de tus reproches y consejos,
de tus caricias, risas y llanto.
Porque el amor que te tuve,
es la plenitud de vida
que de tí me queda,
mientras recorro perdida
hasta encontrarme contigo
el pedregoso camino de la vida.
YALI
Derechos de autor: 10-226-251
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