Centellas en los ojos nos apresuran,
el ansia febril nos apremia
y en arrebato fugaz
un lecho candente nos espera.
En desorden cae la ropa
y entrelazados tu y yo
nos fundimos en un solo cuerpo,
los dedos no nos alcanzan
para tanto derroche de caricias.
Somos uno solo
vibrando de pasión enternecida
y llevando a la locura los deseos.
No tenemos mucho tiempo
y el reloj incontrolable
no es nuestro cómplice,
¡Antes bien!
parece estar más apresurado,
celoso de nuestro encuentro.
¡Ha llegado la hora!
y al querer partir...
nuestra ropa parece estar poseída.
¡No logro alcanzar la media!
sola camina sobre la silla,
la blusa escapa de mi mano
como arrebatada por un fantasma,
tu camisa al clóset ha escapado
y tu pantalón se refugia en una esquina.
Toda la ropa ha cobrado vida
y luchando por alcanzarla
se esconde bajo la cama,
¡Desistimos del intento!
y volvemos a la pasión
¡Que nos busca enajenada!.
YALI
Derechos de autor: 10-305-80
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